La acidez estomacal es una molestia común que se caracteriza por presentar una sensación de ardor en el pecho o la garganta, causada por el reflujo de ácido gástrico hacia el esófago. Aunque hay varios factores que contribuyen a este problema, la alimentación juega un papel crucial en su prevención y manejo. Adoptar una dieta adecuada puede reducir su aparición y mejorar la calidad de vida de quienes sufren de acidez recurrente.

¿Qué causa la acidez?

La acidez ocurre cuando el ácido del estómago sube hacia el esófago. Esto puede ser resultado de una debilidad en el esfínter esofágico inferior, una válvula que normalmente evita que el contenido del estómago regrese al esófago. Normalmente, la acidez es un síntoma del reflujo gastroesofágico.

Además de problemas anatómicos, ciertos alimentos y hábitos alimenticios pueden desencadenar episodios de acidez. Por eso, ajustar la dieta es fundamental para prevenir este malestar.

Alimentos que provocan acidez

Entre los tipos de alimentos que pueden desencadenar acidez destacan:

• Grasas: las comidas ricas en grasa (frituras, embutidos, productos lácteos enteros) tienden a ralentizar la digestión y aumentan la producción de ácido en el estómago.
• Picantes: los alimentos muy condimentados o picantes pueden irritar la mucosa gástrica y facilitar el reflujo ácido.
• Cítricos: frutas como naranjas, limones o pomelos son ácidas debido a su alto contenido de vitamina C y pueden desencadenar los síntomas.
• Tomate y sus derivados: el tomate, tanto fresco como en salsas, es conocido por aumentar la acidez estomacal.
• Chocolate y café: ambos alimentos relajan el esfínter esofágico inferior, lo que facilita la aparición de la acidez.
• Bebidas carbonatadas y alcohólicas: estas bebidas, al igual que las gaseosas y el alcohol, incrementan la presión en el estómago, favoreciendo el reflujo ácido.

Evitar o moderar el consumo de estos alimentos es un paso esencial para prevenir los episodios de acidez.

Alimentos beneficiosos para prevenir la acidez

Así como existen alimentos que pueden provocar acidez, hay otros que ayudan a neutralizar el exceso de ácido o favorecen una digestión más suave. Incorporarlos en la dieta puede reducir su frecuencia y severidad.

• Avena: rica en fibra, la avena es un excelente desayuno que ayuda a absorber el exceso de ácido y proporciona una digestión lenta y regular.
• Verduras verdes: brócoli, espinacas, espárragos y otras verduras verdes tienen un bajo contenido en grasa y ácido, lo que las convierte en una opción segura y saludable.
• Plátanos y melones: estas frutas son bajas en ácido y pueden actuar como un calmante natural para el sistema digestivo.
• Pavo y pollo sin piel: estas carnes magras son más fáciles de digerir y menos propensas a provocar acidez que las carnes rojas o grasosas.
• Jengibre: cuenta con propiedades antiinflamatorias naturales. El jengibre puede calmar el estómago y reducir los síntomas de acidez.
• Agua y té de hierbas: mantenerse hidratado es esencial, y el consumo de infusiones de manzanilla o jengibre puede ayudar a neutralizar el ácido estomacal.

Otros consejos para evitar la acidez

Más allá de qué comer, es importante saber cómo comer. Aquí algunos consejos prácticos:

• Ingerir porciones pequeñas: las comidas grandes aumentan la presión en el estómago, lo que favorece el reflujo. Lo mejor es optar por porciones moderadas a lo largo del día.
• Evitar acostarse después de comer: es importante esperar al menos dos o tres horas después de una comida  para acostarte, así se evita que el ácido suba al esófago.
• Masticar bien los alimentos: Facilita el trabajo del estómago al masticar lentamente, lo que también evita la ingesta excesiva de aire.
• Evitar la automedicación: aunque ciertos fármacos pueden aliviar temporalmente los síntomas, los antiácidos no deben ser el único tratamiento.

La acidez estomacal puede ser una molestia constante, pero una dieta adecuada puede marcar una gran diferencia. Identificar y evitar los alimentos que la desencadenan, junto con la incorporación de opciones que promuevan la digestión saludable, es clave para prevenirla.

Fuentes:

1. https://www.niddk.nih.gov/health-information/informacion-de-la-salud/enfermedades-digestivas/reflujo-gastrico-rge-enfermedad-por-reflujo-gastroesofagico-erge-adultos/alimentacion-dieta-nutricion
2. https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0211699519300037
3. https://www.elsevier.es/es-revista-cirugia-espanola-36-articulo-bases-cientificas-tratamiento-medico-referente-dieta-habitos-13098846